Utilizando Tinkercad software de modelado 3D, han creado la estructura del dron, imprimiéndola en PLA con las impresoras 3D del colegio. El PLA o ácido poliláctico es un tipo de plástico biodegradable hecho a partir de recursos naturales como el almidón de maíz, la caña de azúcar o la remolacha. Para completar el montaje, han reutilizado la electrónica de un dron en desuso, demostrando creatividad y conciencia ecológica.
El resultado es un dron operativo, fruto del trabajo colaborativo y el aprendizaje práctico. Este proyecto destaca por combinar reciclaje, diseño digital y fabricación aditiva.
Ángel Luis Trujillo Ñacle, Profesor de Tecnología e Ingeniería